El legado de dudas que dejó Michael Jackson

Un mes después aún no se ha aclarado el futuro de sus hijos ni la causa de su muerte.

Ha pasado un mes desde que una noticia inesperada , de madrugada, convulsionara al mundo. La excéntrica y reservada vida de Michael Jackson llegaba a su fin, y tras de sí dejaba un montón de rumores y preguntas. Tres hijos sin un hogar estable, médicos y amistades en el punto de mira y los lazos y secretos de una familia famosa llenando titulares. La investigación aún sigue abierta, su cuerpo aún no ha sido enterrado. El rey del pop aún no descansa en paz.

Con la muerte de Michael, se abrió la caja de pandora, el baúl de los recuerdos. Celoso de su intimidad, de sus seres queridos y hasta de su forma de trabajo, Michael Jackson, venerado por miles de fans, no vendía discos a golpe de intimidades, sino que conseguía una masa de seguidores escondiéndose tras gafas de sol y lentejuelas. Los que le conocían y le querían han mostrado quién era al mundo, a sus adversarios y a sus fans, y con ello han encontrado dos respuestas: los que creen que no han respetado sus deseos, y los que piensan que así le están haciendo justicia. Pero la avalancha de fotografías,lágrimas,declaraciones,exclusivas y recuerdos del artista no han servido más que para arrojar más leña al mito, más dudas a la verdad.
Las causas de su muerte, a sus 50 años, son una incógnita. Un posible homicidio. Una sobredosis de medicamentos de dudosa procedencia. Un mes después, una autopsia aún sin cerrar, con los ojos de todos a la espera de pistas. Su muerte es extraña. Es una investigación policial donde todos tienen algo que decir, todos quieren saber y poder opinar, lo que ensombrece aún más sus últimos días.
Su situación económica, las subastas que pretendía realizar y la gira de conciertos para estabilizar su economía esconden lo que parece ser una cuantiosa deuda. En vida, a su alrededor no cuadraban las cifras; tras su muerte, las ventas de sus discos se han multiplicado, así como las entrevistas de todos los que estuvieron cerca de él.
Y en esta vorágines de titurales con preguntas sin resolver, se encuentra una peculiar familia, los Jackson. Un padre agresivo y disciplinario que llora la muerte de su hijo. Unos hermanos distanciados que alaban a Jackson.Tres niños sin un futuro resuelto a los que de repente vemos las caras. La madre de dos de éstos que reclama la custodia y a la que pretenden acallar con dinero. Todo, un sinsentido.